El Parlamento de la Unión europeo acaba de aprobar el cargador único o universal para los móviles. La directiva de 2014 sobre equipos radioeléctricos ya reclamaba el desarrollo de un cargador único, y también daba a la Comisión competencias para impulsar este objetivo a través de un acto delegado. Como consecuencia de esta aprobación, los eurodiputados han encargado a la Comisión desarrollar una nueva legislación al respecto que debe estar preparada antes del verano de 2020. La decisión fue aprobada por una gran mayoría de los eurodiputados, recibiendo 582 votos a favor, 40 en contra y 32 abstenciones.
Esta iniciativa del cargador universal, que ya comenzó a platearse en el año 2009, nunca había sido aceptada ni desarrollada proactivamente por los fabricantes, por lo que la Unión Europea ha decidido tomar la iniciativa i legislar al respecto. A pesar del tiempo pasado, los acuerdos voluntarios entre distintos fabricantes no han logrado el objetivo perseguido.
Los eurodiputados han insistido durante estos años en reclamar un cargador único para todos los modelos de móvil, tabletas, libros electrónicos y otros dispositivos portátiles.Según algunos cálculos, los cargadores desechados en la UE generan 51.000 toneladas de basura al año. Eso supone una media de 6Kg, por persona. Solo en Europa y durante el año 2016, la basura electrónica alcanzó la cifra de 12,3 millones de toneladas, unos 16,6 Kg. por habitante. Es por ello, que el objetivo principal que persigue esta iniciativa de la Comunidad Europea es reducir la cantidad de residuos electrónicos y facilitar a los consumidores opciones sostenibles, al mismo tiempo que se garantiza la interoperabilidad entre los diferentes dispositivos móviles.
Muchos fabricantes de dispositivos Android ya han avanzado en esta dirección adoptando el conector USB tipo C, aunque es verdad que algunos siguen utilizando el micro USB. A pesar de ello, el fabricante más reacio a aceptar el cargador universal ha sido Apple que no se ha mostrado nunca dispuesto a renunciar a sus accesorios con conectores lightning, por motivos tecnológicos, pero también comerciales y de marca.
Esta votación afecta directamente a Apple, que tendrá que extender el uso de los cargadores USB-C más allá de sus iPad Pro y gama de MacBook, MacBook Pro y MacBook Air, sino también a los iPhone, iPad e iPod Touch a partir del momento en el que la Comisión decida que no se pueden vender dispositivos con otros estándares.